Confieso que desearía escribir por mucho tiempo al son de razones y promesas.
Confieso que sueño constantemente y evoco de la mano de la nostalgia. Confieso que añoro y apremio.
Confieso que el tiempo se ha concentrado en instantes, donde observo desde afuera la tensión de un vacío.
Confieso que evalúo continuamente, conveniencias e inconveniencias.
Confieso mis alcances y mis lejanías, lo que está cerca e impalpable, lo que reside en la memoria, tan sólo allí.
Confieso las premuras, los aciertos, los desaciertos y la plenitud que ahora emergen en una mente vagabunda.
Confieso que sueño constantemente y evoco de la mano de la nostalgia. Confieso que añoro y apremio.
Confieso que el tiempo se ha concentrado en instantes, donde observo desde afuera la tensión de un vacío.
Confieso que evalúo continuamente, conveniencias e inconveniencias.
Confieso mis alcances y mis lejanías, lo que está cerca e impalpable, lo que reside en la memoria, tan sólo allí.
Confieso las premuras, los aciertos, los desaciertos y la plenitud que ahora emergen en una mente vagabunda.
2 comentarios:
Quisiera saber de esa plenitud con la que concluyes el texto. Nos vemos mañana, niña.
Y yo te confieso que me gustaria tenerte por mucho mas tiempo a mi lado, a esa amiguita que quiero tanto...
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