miércoles, 20 de agosto de 2008

Cambios

Lentamente y con rapidez todo avanza sin tregua, es una ley de la vida como suele decirse, paradójicamente es el cambio el que permanece. Mutar de un estado a otro, como piel de camaleón, cambiamos para volver al principio, pero necesitamos recorrer el círculo para darnos cuenta una y otra vez de lo que significa existir, independiente de que sea en un infierno o paraíso, la vida simplemente es, está desprovista de particularidades porque todo lo que conocemos es un reflejo de ella misma. Así, el cambio es un paso necesario y natural, pues no hay ningún día igual a otro, cada fin da lugar a un inicio mas lo que empieza está cubierto por novedad e incertidumbre, las posibilidades siempre son inagotables y nuestras determinaciones por más fijas e inmutables que se conciban portan un matiz de imprevisto a pesar de que la realidad parezca producto del cálculo programado inserto en la mente sobre lo que debe o no suceder. Las transiciones y cambios son necesidad que desatrancan el pensamiento y la perspectiva, y oxigenan las creencias.

1 comentarios:

[sq] dijo...

Sería aún más determinante hacer de ese cambio o de esa definición de la que hablas, algo que realmente pueda verificarse, algo ue contundentemente nos lleve deuna instancia a otra supremamente diferente... así, notaríamos verdaderamente un cambio!